Curso de Surya Namaskara Tradicional

Está basado en el conocimiento yóguico original.

Se estudia y se realiza cada asana junto con una determinada secuencia de respiración, conciencia de los chakras y repetición del mantra, para terminar con un proceso de relajación que incluye pranayama. 

Por esta razón reconocemos que pocos ejercicios se comparan con surya namaskara en lo que se refiere a su integralidad.

Es más que una serie de ejercicios físicos. Aunque estira, tonifica, estimula y proporciona un masaje a todos los músculos, los órganos vitales y las distintas partes del cuerpo al alternar las flexiones hacia delante y hacia atrás, también tiene la profundidad de una práctica espiritual, traída hasta nosotros desde los tiempos de los sabios védicos.

Su práctica consta de tres elementos: forma, energía y ritmo. Las doce posturas crean la matriz física alrededor de la cual se desarrolla la práctica. Estas posturas generan prana o energía sutil, la cual activa el cuerpo psíquico, que al realizarse en una secuencia constante y rítmica se convierte en una fuerza transformadora de nuestro complejo cuerpo/mente que nos lleva a alcanzar una vida más plena y activa.